Hija de cocinera madrileña y acuarelista toledano. Siendo la pequeña y única niña de cinco hermanos, Raquel Sabina, madrileña de nacimiento, vive los mejores años de su infancia junto al pequeño de sus cuatro hermanos en La Herradura, Granada. Desde su niñez ya muestra su descaro y espontaneidad creando sus fantasías teatrales entre las mesas de cualquier bar costero donde sus padres tomaban una caña. Es en estos años donde despierta su interés artístico con sus primeras clases de ballet. A la edad de diez años, y tras la separación de sus padres, vuelve a Madrid, donde continua con lecciones de gimnasia rítmica. Tras años económicos difíciles, Raquel Sabina empieza a trabajar desde su adolescencia, retomando su educacion a los 17 años, cuando decide ingresar en la Escuela de Interpretación La Cuarta Pared de Madrid, recomendada por el orientador del centro donde cursa sus estudios de secundaria.
Poco después acude a la entrevista para ingresar en este centro. Rápidamente muestra sus buenas aptitudes y es aceptada sin dificultades. Sin embargo, finalizando la entrevista, David Fraile, el director de la escuela, descubre que no tiene la edad mínima para ingresar en La Cuarta Pared. A lo que Raquel Sabina responde: "¿Y si me inscribo y hacemos como que ni tú ni yo sabemos que no tengo 18?...". Sin más remedio, vuelve al año siguiente comenzando sus estudios de Interpretación. Tras tres años de formación actoral se diploma formando la compañía La Trasera de Madrid junto a algunos de sus compañeros de promoción. Trabaja en obras como Vaya Movida, representada a nivel Nacional; y Estación de Juego, representada en el Festival Teatralia 2006 e invitada a festivales internacionales como el de Ocarín, en Santiago de Chile, y Samara, en Rusia.
Rueda doce spots publicitarios, destacando como protagonista en varios de ellos, como Wii Sports o Telefónica Movistar. Seguidamente Raquel Sabina se inicia en el mundo audiovisual siguiendo sus estudio de interpretación frente a la cámara, con Juan Carlos Morales, actor, director y productor teatral.
Atraída por nuevas experiencias, Raquel Sabina decide ampliar sus horizontes. Se traslada a vivir a Singapur para aprender inglés, mejorando sus expectativas personales y profesionales. Su último trabajo es un vídeo musical para el grupo paquistaní "De Atif".